Cumpleaños de Mendelssohn, la historia detrás de la historia

Momentito!
Ya ha estado bueno de ataques contra mí, es hora del Behind the Scenes.

La espera
En el cumple de Toño, Toñito nos llevó a la Sociedad Española, yupi piscina!
Todas nos fuimos listas al colegio, con nuestro equipaje para irnos a la casa de Toño y de ahí a la piscina. Claro que alguien (Lucía) no pidió permiso y tuvo que ir ese rato con Gretta a conseguirlo. Y otra (Ceci) no hizo su mochila y tuve que acompañarla a que la haga, mientras me contaba una que otra de sus aventuras con perros.

A pesar de que todo eso nos demoró, aun así llegamos antes de Garrett, el cual según nos dijeron estaba en Mary Lizzie...se tardó 1 hora en llegar, y para colmo se olvidó de llevar malla para la piscina.

Todo ese tiempo de espera lo empleamos en intentar inflar una pelota de fútbol que parecía haber sido atropellada por 5 camiones.

La ida
Nos acomodamos en 3 movilidades, todo el clan Hébrido más AleFer (Alejandra y Fernando, tipo Bennifer) en una. Y el resto quien sabe cómo distrubuido en las otras.

Llegamos, primeras impresiones
La última vez que fui debe haber sido hace unos 5 años, cuando estaba en otro colegio, no conocía a ninguna de las Hébridas, ni a Mendelssohn, ni seguramente a otras de las personas que serán nombradas en este blog.

De todas formas, yo todo lo recordaba más grande. Los juegos, los columpios, la piscina. Sí, es que cuando eres niña, todo se ve más grande.

Primera entrada al agua
Una vuelta por el lugar, una ida fugaz al gimnasio, y luego a la piscina! Fuimos pocos los que decidimos entrar, Cecilia, Gretta, Alejandra, Fernando y Lucía que nos observaba desde afuera, aunque gracias a nosotras también quedó mojada.

En fin en la piscina nadamos, nos tiramos del tobogán, yo por delante (bola de miedosas) hasta que fue hora de almorzar.

El almuezo
Milanesa napolitana, sí! En el almuerzo una mesa laaarga, en la que nos sentamos todos, Garrett se sentó al frente mío y no dejamos de discutir.
Finalmente cuando Lucía terminó de comer, todos nos pudimos levantar.

Digiriendo
Fuimos en estampida a las perezosas a tomar un poco de sol y digerir los alimentos. Finalmente, Lucía y yo decidimos ir a socializar un poco, estuvimos un rato con los chicos, sentadas encima de una esponja en forma de rodillo gigante, tratando de mantener el equilibrio. Ummm...equilibrio espiritual.

Fronton
Hasta que al final decidimos ir a traer unas raquetas y jugar fronton (por primera vez en nuestras vidas)
Nos enseñaron cómo hacerlo, y la verdad no estuvo taaaan mal para ser nuestra primera vez. Luego se nos unieron Cecilia y Gretta.

Como yo les llevaba 15 minutos de experiencia a ellas dos, decidí lucirme, y quise hacer un tiro a mayor distancia, me alejé de la pared y...pum! le di con todas mis fuerzas. Con tan mala suerte de que Lucía justo se había parado a mi lado y le llegó el raquetazo en la frente. Fin del juego.

A la piscina de nuevo
Decidimos probar suerte de nuevo en la piscina. Ya varios chicos se habían ido, y nos quedamos con Germán, Topito, Alejandro, Chon y Toño.

Topito decidió no entrar a la piscina y se fue a hablar (la verdad no sé si a hablar, pero de que se fue se fue) con Lucía.

La lluvia
Estábamos en la piscina, nadando, juguetando, y de pronto empezó a llover. Lo primero que cruzó mi mente fue "Qué la cagada, que rica lluvia", lo segundo "Mi ropa!!!" Salí nadando y puse la ropa bajo techo. La lluvia siguió unos minutos más. Y nosotros indiferentes.
Me hicieron pie de gato entre dos y me lanzaron, me subí a los hombros de Germán y él me lanzó. Eso me gustó, me olvidé decírselos en voz alta, pero estuvo muy bien. Claro que conmigo Germán fue un poquito más delicado que con Chon.

El tan polémico juego
Habían chicas y chicos, estábamos en la piscina, y había una pelota. Era lógico lo que teníamos que hacer. ¡Guerra de sexos!

Mujeres le quitan la pelota a los hombres, los hombres a las mujeres.

Germán, Alejandro, Chon y Toño conformaban el equipo masculino.
Gretta, Cecilia y yo éramos el equipo de las féminas.

Momento! ¿4 contra 3?
Y bueno...qué le vamos a hacer!
Pero...ni Gretta ni Ceci pueden nadar rápido. No importa, todavía podíamos ganar, somos mujeres.

Cada vez que la pelota caía en la parte honda, ninguna otra chica iba a buscarla, era yo contra los otros 4, bueno, 3, porque Alejandro cada vez que nadaba gritaba ¡Calambre, calambre!

Finalmente me cansé de nadar de un lado otro y decidí jugar un poco más rudo. Esto significaba marcar a uno de los del equipo contrario y no dejar que le pasen la pelota, o...no dejar que la pase. Y sí, le agarraba las manos para que no la pase, me les colgaba para desequilibrarlos, y a uno le tapé los ojos. En retribución ellos me jalaban las piernas debajo del agua, me hundían cuando estaba llegando a la pelota, o simplemente uno se quedaba dejándome inmovilizada mientras otro nadaba hacia la pelota.

Las cosas se balancearon un poco más cuando la hermana de Toño y su amiga entraron al juego. Entre Gretta, Ceci, las otras chicas y yo, fue todo mucho más fácil.

jajaja, al final terminé toda macurcada de los brazos, moreteada, y con dos heridas pequeñas, pero me divertí muchísimo, y tragué un montón de agua, espero que ellos también.

Bueno, digamos que al final fue un empate.

Hidromasaje y sauna
Faltando poco para irnos nos fuimos a remojar en el hodromasaje. En una palabra, relajante...
Luego entramos al sauna sin vapor; nos sentamos, nos levantamos y nos fuimos.
Luego al sauna con vapor; entré, me senté, saludé y me salí junto con Cecilia.
¡Qué insoportable! puff

De vuelta al hidromasaje, hasta que fue hora de irnos.

En casa de Toño
Ya de vuelta en su casa, le cantamos el Feliz Cumpleaños, comimos torta, lo pringamos. Y ya luego en un ambiente más relajado y menos festivo, algunos tomaron un poco de vino, otros un poco de Baileys, otros un poco de Frutal. Algunos otros cominos un poco de aceitunas (mejores las chiquitas Toño).
Y otros demostraron sus habilidades freaks (Topito cuando está parado de frente puede hacer que las puntas de sus pies apunten hacia atrás, y Germán dobla su dedo gordo hasta que este toca su brazo, Lucía también, además creo que Germán se desencaja el brazo, pero esto último ya no lo vi.)

Fue una charla amena, de todo un poco, que Cristo, que la ONU, que los padres, que las mónadas, que mi perro muerto Yamato viene a visitarme siempre...ya saben, lo usual.

Además, nos comprometimos para un churrasco el 06/06/06

Al final me tuve que ir, casi arrastrándolo a Chon para que deje que lo lleve.

Llegué a mi casa, me bañé...y no me acuerdo más.